De acuerdo con datos limitados proporcionados por el Gobierno alemán, es posible que los drones alquilados por el Ejército alemán estén siendo utilizados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la guerra que se desarrolla en Oriente Medio.
Manufacturados en Israel, los drones Heron TP son usados para el transporte de armas, la vigilancia y la captación de objetivos. En este caso, se trata de dos drones pertenecientes a una flota arrendada por el Gobierno alemán en 2018, bajo el mandato de la entonces canciller Angela Merkel.
En octubre de 2023, cuando estalló la guerra en Gaza, los soldados alemanes se encontraban en Israel recibiendo capacitación sobre el uso de dos drones. En ese contexto, el Ministerio de Defensa alemán emitió un comunicado en el que afirmaba que Alemania había entregado los drones a las Fuerzas de Defensa de Israel «en solidaridad con Israel». Estos drones eran parte de un paquete de asistencia militar que el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, había prometido durante una cumbre, poco después del ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre.
Durante los meses posteriores, la situación respecto al pago del contrato de arrendamiento por parte de Alemania no fue esclarecida, siendo su valor estimado en cerca de 1.000 millones de euros (1.100 millones de dólares). Una solicitud de información pública de abril indicó que, aunque el Ejército alemán había perdido el acceso a los drones, el contrato con Israel continuaba «en vigor».
Los drones Heron son vehículos aéreos no tripulados (UAV) de media altitud y larga duración, diseñados para transportar una amplia gama de armamento. Esta descripción proviene del fabricante Israel Aerospace Industries (IAI) en su página web. En Israel, estos drones son conocidos como «Eitans» y poseen una envergadura de 26 metros. Tienen la capacidad de volar durante más de 30 horas y alcanzar altitudes de hasta 13.700 metros, lo que les permite operar por encima del tráfico aéreo comercial.
A comienzos de septiembre, Hezbolá declaró haber interceptado un dron Heron TP que se dirigía hacia el espacio aéreo del Líbano, lo que provocó su retirada. Además, los drones han adquirido una relevancia crucial en la estrategia de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en el conflicto en Gaza. Según un informe de la publicación especializada Defense News, las FDI también utilizaron drones Heron TP y otros modelos sobre Gaza de manera inmediata tras el ataque de Hamás, ocurrido el 7 de octubre.
En los últimos años, los drones han emergido como un elemento esencial en los conflictos bélicos, ya que tienen la capacidad de sobrevolar objetivos durante períodos prolongados en comparación con los aviones de combate tradicionales. Esta ventaja les permite recopilar información más precisa tanto antes como después de los ataques, lo que incrementa su eficacia en el campo de batalla.
Esto ha dado lugar a lo que los críticos denominan comúnmente la «paradoja de la precisión»: la capacidad de los drones para llevar a cabo ataques más exactos permite la posibilidad de realizar ataques con mayor frecuencia, ya que se emplean en contextos donde no se recurriría a aviones. Según el razonamiento de los críticos, esto conlleva un aumento en el número de muertes de civiles en términos generales.
Nicaragua ha planteado la posibilidad de que los drones Heron sean utilizados para infringir el derecho internacional durante el conflicto en Gaza, en el marco de sus acusaciones contra Alemania, las cuales fueron presentadas ante la Corte Internacional de Justicia bajo la Convención sobre Genocidio de la ONU a inicios de 2024.
En la defensa del caso, los abogados de Alemania minimizaron la responsabilidad del país, afirmando que «mientras los soldados alemanes realizaban entrenamientos con los drones, estos se encontraban desarmados. Tras el 7 de octubre, el personal militar alemán se retiró de Israel debido a la falta de garantías para su seguridad, lo que llevó a la suspensión temporal de su entrenamiento en territorio israelí».
El Gobierno alemán, además de continuar con los pagos, no está dispuesto a proporcionar información adicional sobre el contrato de arrendamiento. En respuesta a las preguntas planteadas por el Parlamento en Berlín a inicios de este año, el Ministerio de Defensa indicó que los pormenores del contrato de arrendamiento de drones con Israel son información clasificada.
El ministerio respondió a una consulta del legislador de la oposición Alianza Sahara Wagenknecht (BSW) indicando que, de ser respondida públicamente la pregunta, la cooperación multinacional del proyecto alemán Heron TP y, en particular, la relación entre Israel y Alemania podrían sufrir un aumento significativo en las tensiones debido a la divulgación de información sensible.
Por su lado, Max Mutschler, Investigador Senior en el BICC (Centro Internacional de Conversión de Bonn), señaló que no veía problemático el que Alemania haya alquilado los drones, pero sí que luego le haya entregado dos de estos a Israel.